Mercado de la Esperanza
Inaugurado en 1904, el Mercado de la Esperanza es un espacio de gran importancia histórica y arquitectónica que resulta ideal para medir el pulso de Santander colándose en el día a día de sus habitantes.
Tras la explosión del barco Cabo Machichaco en 1893, se realizó un plan de remodelación del centro de la ciudad en el que se incluyó la construcción del Mercado de la Esperanza. En 1904 finalizó la construcción del mercado siguiendo la moda europea, con una gran estructura de hierro y vidrio.
Recorriendo el Mercado de la Esperanza
Santander es una ciudad portuaria que lleva el mar en las venas. Esto es algo que se ve claramente representado en el Mercado de la Esperanza, donde la zona de venta de pescado y marisco es la que cuenta con mayor protagonismo.
El mercado cuenta con dos plantas a lo largo de las cuales se distribuyen 80 puestos dedicados a la venta de pescado, carne, quesos, frutas y verduras.
Además de los puestos de frutas, verduras, carne y pescado, el Mercado de la Esperanza cuenta con algunos puestos de productos típicos de Cantabria, por lo que es una buena opción para comprar quesada, anchoas, queso, o cualquier delicia de la zona que queráis llevaros a casa.
Si podéis elegir el horario para visitar el mercado, al igual que ocurre con todos los establecimientos de este estilo, a primera hora de la mañana es cuando encontraréis más movimiento y los puestos repletos de productos.